sábado, 3 de mayo de 2008



Mi otra obra seleccionada en el museo Maguncia, mismo día mismo lugar, abril de 2008.

vestigios

Con mi obrita seleccionada en el concurso del museo Maguncia en La Boca, a la dama de la pintura ya se las presente antés.

Adriana y yo en caminito. Abril 2008



miércoles, 30 de abril de 2008

inseguridades


Grilletes de acero surcan mi espalda calan profundo, me están matando. No me puedo incorporar , sigo en posición fetal. No puedo nacer. Retrocedo. Heridas profundas habitan mi ser. Me duele la vida, me duele hasta el alma. El acero frio me aprisiona duro. No puedo ver.Deseo zafar de grillas tan firmes mi piel lacerada. Que hago?
Ade Viegas L.

lunes, 28 de abril de 2008

Nif, por Sebastián Zaiper Barrasa

Nif
Rip se murió. Fue así, de repente. Aunque nada ocurre así porque sí, ni de repente. Rip se terminó en un instante. No agonizó. Casi no tuvo velorio. Pero hubo, sin embargo, un largo preámbulo a su muerte.Para el sentido común, la muerte está relacionada con el fin: cuando algo muere, se termina; ya no es más; deja de existir. Y esto es definitivo y para siempre. Así, la muerte, pasa a ser el único y verdadero estado eterno. La muerte es como una paradoja de la inmortalidad. Las religiones nos han tratado de convencer de que la muerte está íntimamente relacionada con la vida. Incluso la biología y las demás ciencias nos lo demuestran: del polvo somos y en polvo nos convertiremos y los gusanos nos fermentan y nacen plantas, y las comen los animales, que después se mueren, y el ciclo se repite y las especies se desarrollan y se superan.Rip, entonces, se venía viviendo desde mucho antes de haber sido engendrados sus padres y sus abuelos y los abuelos de sus abuelos. Rip se murió pero a partir de ese momento se sumó a la larga genealogía de los inmortales.He aquí la evolución. La muerte es la pata izquierda; la pata derecha, es la vida.
Publicado por Sebastian "Zaiper" Barrasa

seguimos en lunas


más lunas


Caramelos


Menta y chocolate,.caramelos
Menta y chocolate, yo en tu boca
Menta y chocolate, nuestros cuerpos
Menta y chocolate, tus abrazos
Menta y chocolate, mis suspiros
Menta y chocolate, dentro mio
Menta y chocolate, tu lujuria
Menta y chocolate, consumado
Menta y chocolate, en otros tiempos
Menta y chocolate, el olvido.
Ade Viegas L.

domingo, 27 de abril de 2008

No podemos

No podemos volar con un ala partida,no podemos volar aunque el aire nos llame,bajaremos a tierra, haremos el descansoque nos permita calma y que el ala se sane. Entonces, si volaremos, las dos alas enterasel aire, el viento, el sol, serán fuerza de vidavolveremos en esencia a ser lo que somosy no dolerán tanto los cambios de la vida.

Ade Viegas L.

Joaquin Sabina



Artista: Joaquín Sabina
Album: Inventario
Canción: Inventario

Las cosas que me dices cuando callas,los pájaros que anidan en tus manos,el hueco de tu cuerpo entre las sábanas,el tiempo que pasamos insultándonos,el miedo a la vejez, los almanaques,los taxis que corrían despavoridos,la dignidad perdida en cualquier parte,el violinista loco, los abrigos,las lunas que he besado yo en tus ojos,el denso olor a semen desbordado,la historia que se mofa de nosotros,las bragas que olvidaste en el armario,el espacio que ocupas en mi alma,la muñeca salvada del incendio,la locura acechando agazapada,la batalla diaria entre dos cuerpos,mi habitación con su cartel de toros,el llanto en las esquinas del olvido,la ceniza que queda, los despojos,el hijo que jamás hemos tenido,el tiempo del dolor, los agujeros,el gato que maullaba en el tejado,el pasado ladrando como un perro,el exilio, la dicha, los retratos,la lluvia, el desamparo, los discursos,los papeles que nunca nos unieron,la redención que busco entre tus muslos,tu nombre en la cubierta del cuaderno,tu modo de abrigarme el corazón,la celda que ocupaste en una cárcel,mi barca a la deriva , mi canción,el bramido del viento entre los árboles,el silencio que esgrimes como un muro,tantas cosas hermosas que se han muerto,el tiránico imperio del absurdo,los oscuros desvanes del deseo,el padre que murió cuando eras niña,el beso que se pudre en nuestros labios,la cal de las paredes, la desidia,la playa que habitaban los gusanos,el naufragio de tantas certidumbres,el derrumbe de dioses y de mitos,la oscuridad en torno como un túnel,la cama navegando en el vacío,el desmoronamiento de la casa,el sexo rescatándonos del tedio,el grito quebrado, la madrugada,el amor como un rito en torno al fuego,el insomnio, la dicha, las colillas,el arduo aprendizaje del respeto,las heridas que ya ni Dios nos quita,la mierda que arrastramos sin remedio,todo lo que nos dieron y quitaron,los años transcurridos tan deprisa,el pan que compartimos, las caricias,el peso que llevamos en las manos.





Y ahora, que?


Me levanto con desgano. Deseo dormir un rato más. Imposible. Ya es tarde, el deber del no deber asfixiarme, me llama. No me gusta mi trabajo. Desayuno, prendo el primer pucho del día. Miro eternamente por la ventana de la cocina , con la languidez de lo inevitable. Parto. Llego como todos los lunes al hospital, abro la puerta del kiosco, la cierro rápidamente tardo sólo unos segundos entre el abrir y cerrar, para creer que todavía no estoy ahí. Acomodo la caja, monedas, billetes, calculadora en mano deslizo suavemente la ventana, enciendo las luces y atiendo a la gente que busca desesperada cambiar dos pesos por monedas para el colectivo.
La mañana transcurre en rutinas sucesivas, nada nuevo, nada interesante
Todo es igual , sin cambios. La venta de cosas que ni siquiera consumo, cansada de verlas. Las mismas caras,¿ o son otras las caras? Las mismas cosas, ¿ serán otras las cosas?, puede ser, no importa, los pedidos son parecidos, la gente es parecida, no los diferencia ni siquiera el dolor que llevan cargando quien sabe desde cuando. Caramelos, alfajores, agua mineral, galletitas, alcohol, gasa, se mezclan y confunden en una sola sensación, aburrimiento.
13.30, llega Hernán para tomar la posta de la tarde. Un remís viene a buscarme, al fin libre, el edificio del hospital se pierde desdibujándose a medida que el auto avanza.
Al llegar a casa, nuevamente la cocina, la ventana, yo mirando hacia afuera, el almuerzo rápido, más mates…el embole, la rutina, el hastío.
Llamo a una amiga, nos encontramos en algún café, charlamos un rato, regreso a casa,
Pinto, dibujo, dibujo y pinto, sueños, realidades, colores, esperanzas… La cena. El baño de inmersión. La cama, mi rincón y hasta mañana.

Ade Viegas L.

ahora , las lunas?


Almuerzo en la Boca


Junio de 2007, hacia dos días de mis 53, a partir de ahí mi vida entro en una esfera sin control con cambios constantes, hay un antes y un después, todo fue un acelere que aún hoy trato de entender.....
En la foto estamos: Teo, Jorge Gonzalez Perrin, yo, Adriana, Lily, Carlota, la dulce y querida Carlota.