Hay una fuerza mayor que la acompaña
Y despierta de alba prendió en su pecho
Desempuño martillos que taladran
A cinc muertes horror y desconcierto
Ella era pura corroída en fuego
El aire que corría la velaba
Y en fulgor de miles de atropellos
La calma acompaño festejos
Ade y su luna roja